La inauguración del Centro de Documentación e Investigación Daniel Vidart ubicado donde funcionaba la Biblioteca José Pedro Varela estuvo signada por el recuerdo, el legado del antropólogo y la significación del centro como espacio de la memoria.
Rodolfo Miguez, Magister de enseñanza universitaria, docente adscripto del Departamento de Fuentes Documentales, Recursos y Servicios de Información de la Facultad de Información y Comunicación y docente archivólogo, comenzó su discurso aportando este dato histórico: el 3 de setiembre de 1820 José Gervasio Artigas ingresó a Paraguay para no salir más, siendo el primer exiliado de las Américas. Y el Centro Daniel Vidart “hace una movida en el tablero de los días” porque es un apuesta a la conservación de la memoria. Bregó porque seamos protagonistas “de primera línea” y logremos ver que a nivel del país “estamos inaugurando una casa de la memoria”.
El centro de estas características, público, “con todo el respaldo político para que nazca”, con una colección valiosa de archivos, bibliografía, objetos patrimoniales, “que representa un esfuerzo que resguarda una identidad colectiva está dirigida a universitarios, liceales y escolares y abierto a las prácticas pre profesionales, con la pretensión de ser un centro referente local nacional y regional y destinado a ser de congresos”. Agregó que tiene capacidad para vender servicios y generar divisas.
“El Centro es único. Los sanduceros ¿saben lo que esto significa?”, se preguntó Miguez.